El Real Madrid se impuso con comodidad al APOEL.
Cristiano Ronaldo, por dos veces, Kaká, Callejón y Di María hicieron los goles
de los blancos, que ahora se medirán al Bayern.
Con la eliminatoria cerrada en el partido de Chipre, en
el Bernabéu tan sólo quedaba cumplir con el trámite ante el APOEL y el Real Madrid lo hizo con holgura y goleando al equipo
chipriota. Los de Mourinho se clasifican por segundo año consecutivo para las
semifinales de Champions. Ahí espera un rival de órdago, un viejo enemigo: el
Bayern. La trayectoria de los blancos esta temporada en Europa es espectacular
e invita a soñar con todo. Nueve victorias y un empate dan muestra de que los
blancos están más que preparados para afrontar la eliminatoria ante los
alemanes.
El Real Madrid saltó al césped del Bernabéu sin ningún tipo de confianzas. El 0-3 de la ida no le importó a Mourinho, que tiró de un once de lujo para enfrentarse al APOEL. Sahin volvía a ser titular como lo fue en Chipre hace ocho días y Varane era la pareja de Pepe en el centro de la zaga. Con la eliminatoria sentenciada en Chipre era cuestión de ver cómo se tomaba el equipo el partido. Y lo hizo como si no contase el partido de ida. Desde el minuto uno, los blancos se hicieron con el dominio de balón ante un APOEL que esperaba agazapado en defensa las acometidas del Real Madrid. En el 2’ Higuaín pudo hacer el primero, pero su remate de cabeza se marchó por muy poco. En el 4’ Ronaldo pudo marcar pero Pardo le sacó el remate. El Madrid dominaba a placer y el gol era cuestión de tiempo.
En el 26’ iba a llegar el 1-0. Balón que pone Marcelo en el área y la pelota le llega al segundo palo a Ronaldo que, con la rodilla, empuja al fondo de la red. Los blancos abrían pronto el marcador. Los chipriotas no creaban peligro a Casillas y apenas les duraba el balón en los pies. La fuerte presión del Real Madrid no les dejaba margen de maniobra. En el 36’ Kaká iba a hacer un golazo. El brasileño se acomodó el balón fuera del área y lo colocó de rosca en la escuadra. Un espectacular tanto que puso en pie al Bernabéu. Los blancos eran muy superiores y manejaban el partido a su antojo. Los de Mourinho bajaron el pistón y así se llegó al descanso.
La segunda mitad arrancó con la entrada de Callejón por Marcelo. El Real Madrid vivía un partido plácido y, sin forzar la máquina, los blancos creaban ocasiones. En el 53’ Mourinho dio entrada a Di María por Higuaín. El APOEL se animó viendo que los blancos bajaron el ritmo. El técnico portugués hizo el último cambio en el 64’ y metió en el campo a Albiol por Granero. En el 65’ Manduca, en una buena jugada de los chipriotas, se iba a plantar delante de Casillas y le batía por bajo. 2-1 y los jugadores del APOEL que celebraron el gol a lo grande. El tanto espoleó a los visitantes, que se lanzaron en busca del empate.
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